Platería Cusqueña

Taller Joyería Cachi
Taller Joyería Cachi

La platería cusqueña es una expresión artística orfebre que se desarrolló en la ciudad de Cusco, durante la época colonial, sin embargo, sus antecedentes tienen raíces en la orfebrería prehispánica. Esta tradición artística combina influencias indígenas locales con técnicas y estilos europeos, creando un arte único y de gran complejidad técnica. Durante la época colonial, la platería cusqueña se caracterizó por la precisión de sus detalles y su estilo barroco. Los plateros cusqueños trabajaban principalmente la plata Ley 950, por su alto grado de pureza, aunque también utilizaron otros metales como el oro, el cobre y el bronce. Dentro de su producción destaca una amplia variedad de objetos suntuosos, desde joyas y ornamentos religiosos hasta utensilios domésticos y decorativos. La platería cusqueña alcanzó su apogeo durante los siglos XVII y XVIII, cuando Cusco era una importante ciudad colonial y un centro de producción artística. Además, el insumo mineral de la plata era extraído de centros mineros importantes como el de Potosí, abasteciendo todo el sur andino. Los motivos utilizados en la platería cusqueña son variados y reflejan la fusión de las tradiciones indígenas y europeas. Se pueden encontrar diseños florales, figuras religiosas, escenas bíblicas y símbolos incas y preincas en muchas piezas. Además de su valor estético, la platería cusqueña tiene un significado cultural que refleja la identidad y la memoria de sus portadores. Actualmente, los plateros cusqueños dan continuidad a esta tradición que tiene entre sus técnicas más representativas el vaciado en arcilla, el vaciado múltiple, el repujado, el martillado, el cincelado, el laminado, el trefilado, procedimientos de tratamiento de este metal precioso que la convierten en expresión de un conocimiento complejo y sofisticado que ha pasado de generación en generación., gracias a la formación de plateros y plateras en los talleres familiares.